Se sitúa en la zona sur del municipio, más concretamente en la calle que le da nombre a dicha plaza. Tiene una superficie de 2591 m². Los accesos cuentan con adaptaciones especiales, que permiten el fácil acceso a todo tipo de público. Hermoso lugar para disfrutar al aire libre, aunque no siempre ha presentado su aspecto actual.
En el año 1931, el Ayuntamiento Republicano, acordó sustituir la antigua cruz allí existente “Cruz del Gato” por unas esculturas y arreglar el pozo y pileta.
En el año 1932 fueron inaugurados “Los colegios” y ampliados en 1960. En la década de los años 80, dado el mal estado de los colegios y la existencia de otros más modernos aconsejaron llevar a cabo su demolición, convirtiéndose la plaza en una zona ajardinada y lugar propicio para el esparcimiento de los vecinos.
Hoy, destaca por la presencia de un antiguo pozo y el monumento escultórico en honor a La Niña de la Puebla inaugurado en los primeros años de la década de los 90 obra de M. García Delgado. Soporta actividades compatibles y deseables, como son las zonas de juegos infantiles y zonas para los aparatos biosaludables para actividades físicas.
Respecto a la botánica destacan los árboles del amor que rodean toda la Plaza y le dan un aspecto pintoresco cuando presentan sus tallos desnudos cubiertos de flores rosas, así como las mimosas de hojas frágiles y flores olorosas. Los ejemplares más vetustos están representados por las acacias de las tres espinas, que ya existían con los antiguos colegios y a las que la gente llama vulgarmente algarrobas por su fruto en legumbre y que guarda cierto parecido con los del algarrobo.
Frente a esta Plaza se encuentra la casa donde nació “La Niña de La Puebla”, en cuya fachada hay una placa conmemorativa, donde se puede leer:
“ En la Plaza Nueva, en La Puebla,
nació la hija de Casamía,
la luz que faltó en sus ojos
iluminó Andalucía.”
Espacio de estancia agradable, reconocido por los habitantes del municipio por su historia y ubicación